El riego eficiente es fundamental para mantener el jardín saludable, el objetivo es que las plantas reciban suficiente agua optimizando el uso de esta sin desperdiciarla.
Principio del riego eficiente
- Acomodarse a los requisitos de cada planta: dependiendo del tipo, etapa y condición meteorológica.
Es importante que el agua llegue a las raíces para promover o impulsar un correcto desarrollo. - Minimizar la evaporación
Se recomienda regar temprano por la mañana o al anochecer - Monitoreo y ajuste
Regar según la humedad del suelo y las condiciones atmosféricas para evitar el exceso o la carencia de riego.
Prácticas recomendadas
- Control de humedad del suelo
Uso de sensores que ayudan a conocer datos para establecer horarios adecuados para el riego.
También, otra herramienta útil es introducir una varilla o pala en el suelo para comprobar la humedad del fondo. - Acolchado
Mantiene la temperatura y elimina las malas hierbas, para ello se puede utilizar compost con trozos de madera o plástico. - Programación apropiada del riego
Tener en cuenta el clima y fijar varias áreas de riego según las exigencias de cada planta. - Mantenimiento
Conservar los sistemas con una limpieza adecuada y realizar reparaciones o ajustes que eviten un riego dispar. - Uso de plantas adaptadas
Plantar especies autóctonas y juntar las que tienen requisitos similares para no malgastar agua.
El riego eficiente une métodos óptimos con el uso de tecnología y con prácticas más comunes. Conocer las necesidades de cada planta es crucial para obtener los mayores beneficios posibles, evitando a toda costa el malgaste de agua.