Cuando hablamos de poda de árboles a gran altura nos referimos a cortar las ramas y troncos que sobran de un árbol de cierta envergadura, normalmente porque ha crecido de forma descontrolada o porque es necesaria una limpieza que favorezca su crecimiento.
El riesgo de este tipo de actividad es elevado y se precisa una maquinaria específica y conocimientos, ya que en ocasiones se realizan podas a más de 20 metros de altura.
Cualquier movimiento fallido puede derivar en graves consecuencias, por tal motivo, contamos con profesionales que se encargan de la poda del árbol en altura.
Hay que distinguir entre poda en altura y tala de árboles. La tala se refiere a la corta del árbol desde la base, es decir, cortar a nivel del pie del árbol y, por lo tanto, eliminarlo directamente.
Tipos de poda a gran altura:
- Poda de saneamiento: Esta poda consiste en la retirada de ramas secas, rotas o entrecruzadas. Está pensada para incrementar la oxigenación de la copa y ayudar al crecimiento del árbol. Evita también la caída de ramas en fuertes temporales porque el árbol ejerce menor resistencia al viento una vez la poda está realizada.
- Poda de apeo: La poda con apeo cosiste en atar las ramas y bajarlas hasta el suelo de forma controlada usando poleas, cuerdas y frenos de fricción. De este modo conseguimos no dañar la posible estructura o vegetación que tengamos bajo dicho árbol.
- Poda con plataforma: Se puede utilizar en podas de gran magnitud para optimizar el tiempo, ya que la plataforma permite acceder a los árboles de una manera más rápida. También puede emplearse para la poda o terciado de hileras de árboles en avenidas.
- Elevación de copa: Se suele hacer en los árboles jóvenes para ayudarles en su proceso de auto-poda. Ayuda a acelerar su crecimiento y un desarrollo equilibrado.
- Reducción de copa: Este tipo de poda se suele llevar a cabo para controlar el crecimiento de determinadas especies (especialmente las de crecimiento rápido).